1. La batalla de Stalingrado: La batalla de Stalingrado, que duró desde julio de 1942 hasta febrero de 1943, se considera a menudo como un punto de inflexión en la guerra. Fue una gran derrota para el ejército alemán y marcó el final de sus operaciones ofensivas en el frente oriental. La victoria soviética en Stalingrado elevó la moral de las fuerzas aliadas y demostró que el ejército alemán podía ser derrotado.
2. La invasión aliada del norte de África (Operación Antorcha): En noviembre de 1942, las fuerzas aliadas desembarcaron en el norte de África francés como parte de la Operación Antorcha. Esta campaña aseguró efectivamente el control del norte de África y abrió un segundo frente contra las potencias del Eje. También condujo al eventual colapso del régimen francés de Vichy y aisló aún más a Italia.
3. El bombardeo de Alemania: La campaña de bombardeos estratégicos aliados contra Alemania se intensificó en 1943, particularmente con el uso de bombarderos pesados como el B-17 Flying Fortress y el B-24 Liberator. Los bombardeos tuvieron como objetivo centros industriales, redes de transporte y ciudades alemanas, causando daños significativos al esfuerzo bélico alemán y socavando la moral civil.
4. La batalla de Kursk: En julio de 1943, los alemanes lanzaron una ofensiva masiva en el saliente de Kursk, conocida como Operación Ciudadela. Los soviéticos, conscientes de los planes alemanes, prepararon una defensa profunda y lograron repeler el ataque alemán. La batalla de Kursk fue la batalla de tanques más grande de la historia y provocó grandes pérdidas para el ejército alemán, debilitando aún más su posición en el frente oriental.
5. La campaña italiana: En julio de 1943, las fuerzas aliadas invadieron Sicilia y, en septiembre, desembarcaron en el continente italiano. Las débiles defensas de Italia y la agitación política interna llevaron al derrocamiento del dictador fascista Benito Mussolini y al posterior armisticio italiano con los aliados. Esto abrió un nuevo frente en el sur de Europa y exigió aún más los recursos alemanes.
6. La ofensiva aérea estratégica aliada: A principios de 1943, los aliados iniciaron una ofensiva aérea estratégica contra Alemania, dirigida a industrias y centros de transporte clave. Los bombardeos, llevados a cabo por las fuerzas aéreas aliadas, tenían como objetivo perturbar la producción alemana y debilitar la capacidad del país para hacer la guerra.
7. La Conferencia de Teherán: En noviembre de 1943, los líderes de las potencias aliadas (Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Soviética) se reunieron en la Conferencia de Teherán. Durante la conferencia discutieron planes para el mundo de la posguerra, estrategias militares y la apertura de un segundo frente en Europa. La conferencia fortaleció la alianza aliada y sentó las bases para una mayor coordinación en el esfuerzo bélico.
Estos factores se combinaron para cambiar el impulso a favor de las fuerzas aliadas y marcaron el principio del fin del dominio de la Alemania nazi en el teatro europeo de la Segunda Guerra Mundial.