1. Descubrimiento y Exploración:
Cuando los exploradores europeos llegaron por primera vez a América, creyeron que habían descubierto un nuevo continente que antes desconocían. Este sentido de descubrimiento llevó al uso de la palabra "nuevo" para distinguir estas tierras del mundo conocido de Europa, Asia y África.
2. Tierra Incógnita:
El término "terra incognita" (tierra desconocida) se usaba comúnmente en los mapas para referirse a territorios inexplorados o inexplorados. Cuando los europeos comenzaron a explorar y cartografiar América, nombraron muchos lugares con la palabra "nuevo" para indicar que estas áreas eran previamente desconocidas e inexploradas.
3. Reclamando Posesión:
Al utilizar la palabra "nuevo", los europeos afirmaron su derecho de propiedad y posesión sobre las tierras recién descubiertas. El uso de "nuevo" implicaba que estos lugares anteriormente carecían de civilización o de un gobierno adecuado y, por lo tanto, los colonizadores europeos tenían derecho a establecer sus colonias y hacer valer su autoridad.
4. Diferenciarse de las civilizaciones establecidas:
El término "nuevo" también ayudó a distinguir las tierras recién descubiertas de las civilizaciones establecidas que ya existían en América. Al utilizar la palabra "nuevo", los europeos enfatizaron la novedad y el carácter distintivo de los territorios americanos en comparación con las regiones familiares a las que estaban acostumbrados.
5. Marketing y Atracción:
El uso de la palabra "nuevo" se empleaba a veces con fines de marketing para atraer colonos y aventureros a las tierras recién colonizadas. Creó una sensación de entusiasmo y oportunidad, lo que implicaba que estos "nuevos" lugares ofrecían nuevas posibilidades y recursos para quienes estuvieran dispuestos a emprender el viaje.
Estas son algunas de las razones por las que los europeos utilizaron la palabra "nuevo" en los nombres de lugares de América durante el período colonial. No sólo reflejó su percepción del descubrimiento y la exploración, sino que también sirvió como una forma de reclamar posesión, diferenciarse de las civilizaciones existentes y atraer colonos a estas nuevas fronteras.