Dejando de lado el llamado “caso Gali” , pero sin quitarle toda la importancia que merece, así como los debates subsidiarios abiertos –sobre si la entrada en España de Brahim Gali, presidente de la RASD (República Árabe Saharaui Democrática) era legal o ilegal. , contagiado por Covid-19, por su tratamiento en el hospital San Pedro de Logroño, sobre si el ejecutivo podía denegarle o no dicha entrada, sobre quién ordenó a la policía que no le pidiera el pasaporte, sobre por qué entró con un nombre falso ( o "diferente"), sobre el motivo por el cual Marruecos no fue informado de la visita, sobre la necesidad o no de constituir una comisión de investigación a tal efecto en el Congreso, sobre quién es la X que dirigió el proceso, sobre la consideración de censura/ silenciar cualquier información relacionada con el "caso", y más ítems que surgirán, seguramente, como motivo de lucha política en el asunto -es necesario considerar aquellos aspectos previos, poco expuestos, o relacionados, que son el sustrato del Las tensiones actuales en las relaciones entre España y Marruecos. Tensiones que vienen de lejos, pero que actualmente tienen que ver con el nuevo conflicto armado abierto entre la RASD y Marruecos en el Sáhara Occidental , exigiendo el primero, la liberación de los territorios ocupados, y el segundo, la soberanía de aquellos.
Así, bajo esta consideración, no fue sólo la presencia de Gali en España por razones humanitarias lo que tensó las relaciones antes mencionadas, sino también el hecho de que Gali, líder de la RASD y jefe de El ELS (Ejército de Liberación Saharaui), siempre "enemigo" de Marruecos, acudió a España en un momento en el que el pueblo saharaui ya se encontraba en guerra abierta con Marruecos (el 13 de noviembre de 2020, unos siete meses antes de la citada visita, el pasado mes de abril). 22, 2021).
Asunto de la visita a la que Rabat, sin hacer ninguna referencia al citado conflicto, respondió destacando que la decisión española, tomada a espaldas de su socio y vecino, si la hay De no existir una respuesta satisfactoria y convincente, se consideraría una amenaza a las relaciones mantenidas entre ambos países que no dejaría de ser respondida.
Es como, valga la cruda comparación, si, por ejemplo, Inglaterra y Francia estuvieran en guerra y España acogiera al presidente inglés por cualquier motivo; Lógicamente la tensión diplomática y política entre España y Francia, y más si hubiera alguna divergencia previa, saltaría instantáneamente.
Un conflicto armado actual, del que poco se sabe debido a su escasa o nula presencia en los medios de comunicación, tanto nacionales como internacionales, y que parece estar siendo prácticamente silenciado por algunos sectores interesados
Los saharauis, cansados de la pasividad marroquí e internacional respecto a su independencia, cerraron, el 21 de octubre de 2020, el paso "ilegal" de Guerguerat abierto en el muro marroquí, pasado de conexión con Mauritania. y otros países africanos (que ya fue cerrado antes, en 2017), buscando la asfixia de los intereses económicos marroquíes (actualmente ya tocados por la sequía en el sector agrícola y el esfuerzo por frenar la pandemia) y, al mismo tiempo, los de otros europeos, incluidos los españoles, para que sirva de llamada de atención a la comunidad internacional. y, al mismo tiempo, de presión a la ONU para el cumplimiento de sus deberes hacia el pueblo saharaui.
Asunto que fue comunicado previamente a la Misión de la ONU para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO) con la indicación de que el paso no se abriría hasta que se alcanzara una solución para los territorios saharauis ocupados y la celebración de un referéndum de autodeterminación como solución al conflicto
Acción que, con la respuesta marroquí de intervención policial/militar en la zona y la apertura del muro (“de vergüenza” o “de humillación” a los saharauis ) de una nueva brecha o varias, tensaron la situación, llegando incluso a que el lado saharaui amenazara con volver a la guerra; Amenaza saharaui a la que Marruecos respondió acusando al Frente Polisario de violar las resoluciones de la ONU y poner en peligro el alto el fuego en el Sáhara Occidental, al tiempo que ordenó a sus fuerzas intervenir en Guerguerat enfrentándose a los manifestantes saharauis, lo que provocó, a su vez, la respuesta del ESL en su defensa.; Enfrentamiento en el que, salvo informaciones contradictorias, sólo hubo, al parecer, un cierto intercambio de disparos, sin provocar bajas en el ejército marroquí ni en el saharaui, que defendió y evacuó a los manifestantes.
Tensión que provocó que el Frente Polisario, en una manifestación pública (luego comunicada al Secretario General de la ONU), afirmara que la flagrante agresión de la intervención armada marroquí sería respondida con firmeza y significaría el fin del alto el fuego, abriendo la puerta al estallido de una nueva guerra total en la región; una guerra que sería larga si Marruecos no admitiera un referéndum de autodeterminación. Guerra que no fue reconocida como tal por Marruecos al considerar que no se había producido la agresión militar denunciada por los saharauis.
¿Guerra ficticia o guerra silenciosa?
Tras esta declaración, el Frente Polisario aseguró que la guerra ya había comenzado (13 de noviembre de 2020) con acciones de acoso, bombardeo de artillería y combate en los frentes norte, central y sur del muro; guerra que, al parecer, movilizó a "centenares de jóvenes" frente al cuartel general de Defensa en Tinduf para alistarse en el Ejército saharaui.
En ese momento, a pesar de lo anterior, había analistas y observadores que, con más preguntas que certezas, se preguntaban ¿realmente ha comenzado la guerra en el Sáhara Occidental?
Se hablaba entonces de “cuestiones y certezas” porque algunos analistas aún no sabían si el conflicto actual merecía el nombre de guerra o no; y esto porque, al menos por el momento, aunque la parte saharaui habló (sin presentar pruebas fehacientes) de una declaración de guerra , de acciones militares y de partes cotidianas de la guerra en las que se indicaban los objetivos atacados, las bajas marroquíes, sus deserciones..., Marruecos, calificó los ataques saharauis de meros acosos y provocaciones, al no reconocer el incumplimiento del alto el fuego de 1991, y con ello la situación de conflicto armado.
A partir de entonces se planteó una batalla por la historia entre ambas voluntades hostiles, enfrentándose a dos versiones diferentes de los hechos, defendiendo cada una sus propios intereses; Versiones que, ante la ausencia de observadores internacionales, fueron expuestas con verdades a medias y hasta mentiras.
Así, la parte marroquí, sin hablar de guerra, desprecia al ESL considerándolo dentro de la categoría de una simple milicia e incluso de terroristas y no de un ejército regular, sin hacer caso, silencia y menosprecia las acciones saharauis sin darles ninguna respuesta activa y sin reconocer posibles bajas; Todo lo contrario por parte de los saharauis, que difunden diariamente sus informes de guerra, buscando que su actividad bélica influya positivamente en la comunidad internacional de cara a la resolución definitiva del diferendo con Marruecos.
Así, respecto a la guerra, declarada y llevada a cabo mediante acciones militares únicamente por el lado saharaui, cabían las siguientes dos posibilidades:
- Guerra ociosa como tal entre las partes por falta de respuesta de la parte marroquí, que no quiere caer en la trampa estratégica que plantean los saharauis al negar su inexistencia, a pesar de las posibles víctimas (no verificables y contrastadas por la falta de observadores internacionales independientes), silenciar/ negando al mismo tiempo los ataques saharauis; Inacción marroquí que parece intentar promover el cansancio militar y político saharaui y más si no cuenta con el apoyo internacional, demostrando así que son los saharauis quienes han caído, al reconocer y hacer la guerra, en el error estratégico que suponían. para Marruecos. "Guerra" sin respuesta marroquí, en la que la propaganda saharaui es muy activa buscando dar a conocer sus reivindicaciones, su actual actividad militar y política en el ámbito internacional, buscando también elevar y mantener la moral de sus combatientes y atacar la moral marroquí por desacreditar cualquiera de sus actividades. Inactividad bélica por falta de respuesta marroquí que está provocando también que la diplomacia de los contendientes, de los países de la región y de las organizaciones africanas y europeas tenga una actividad creciente en defensa de sus propios intereses.
- Guerra activa por ambos bandos que Marruecos, por el momento, niega que se está deshaciendo y habla de “ruido” por parte del FP para llamar la atención internacional para alcanzar un nuevo acuerdo de paz/alto el fuego, pero que, posiblemente, no alcance las expectativas saharauis del referéndum. Esta guerra, activa por tanto entre los dos contendientes, es considerada por los saharauis como una segunda parte de la primera y que será provocada, tarde o temprano, por la constante acción militar saharaui; guerra entonces que, con acciones militares de gran escala, podría, según su versión, extenderse a otros actores participantes; caso en el que, creciendo en una violencia más o menos controlable y sin visos de detenerse, influiría notablemente en la seguridad y la estabilidad del Magreb y, por tanto, del Sahel, así como, derivadas de aquéllas, en las actividades económico-comerciales , no sólo española, y sobre la cooperación regional necesaria para la prosperidad de los países integrados en dichas regiones. Inseguridad que se acentuaría con la posibilidad de que se pudiera crear un foco de terroristas yihadistas en la región e, incluso, que algún grupo yihadista liderado e integrado por algunos saharauis, independiente del Frente Polisario, pudiera sumarse, de alguna manera, al conflicto contra Marruecos actuando, no sólo en la zona de guerra (la ocupada por Marruecos) sino también en el interior del país magrebí.
Guerra que, con el silencio indiferente y la no intervención marroquí, que continúa hoy, ya en octubre de 2021, se ha convertido para el Frente Polisario en una batalla informativa sin imágenes significativas. , a lo que Rabat no responde directamente (sólo se ha recogido la afirmación del entonces jefe del Gobierno marroquí, Saadedin el Ourmani, de que "las victorias saharauis son imaginarias"; silencio marroquí que a su vez mantiene la ONU y la mayoría de la prensa internacional.
Batalla informativa en la que participan los saharauis con la difusión de los ya mencionados informes de guerra difundidos diariamente por sus propias redes, incluida la Agencia Saharaui de Noticias (SPS) , siempre bajo el mismo modelo básico:tras indicar el número y fecha del informe, el número de ataques realizados mediante acción de artillería (de todos los calibres), morteros y cohetes, los lugares de la muralla o localidades de la zona ocupada donde Unidades marroquíes que fueron atacadas, un indicio, poniendo de relieve su capacidad de destrucción, de las múltiples bajas de personal y material de las fuerzas marroquíes, de su estado de baja moral y de deserciones, y poniendo de relieve en todo caso el silencio y la falta de respuesta de Marruecos, además de la falta de cobertura informativa sobre la conflagración, tanto por parte de los países marroquíes como de los occidentales, favoreciendo así la estrategia marroquí del silencio.
Informaciones que los saharauis intentan contrastar a través de sus propios vídeos de la zona desde la que realizan sus bombardeos (artilleros y con cohetes), entrevistas con algunos de sus comandantes, fuentes no oficiales en los territorios ocupados, de periodistas argelinos (lógicamente a su favor) de la RTA (Canal 3) o de algunas, según sus indicaciones, filtraciones marroquíes no verificadas, procedentes de familiares de militares muertos o heridos que eludían las amenazas del gobierno (es extraño que no se producen en mayor número dada la situación de persecución de muchos periodistas críticos con el Gobierno).
Análisis del conflicto, cualquiera que sea, que algunos analistas, para dar cuenta de sus dimensiones, han buscado complementar con datos sobre las fuerzas presentes y sus estrategias, tanto bélico y tan informativo como diplomático. Así, respecto a estas fuerzas, se intenta proporcionar datos relacionados con cantidad, medios, armamento…, haciendo una comparativa entre ellas según los datos abiertos que se obtienen; comparación de la que se infiere que es favorable, con manifiesta superioridad, a Marruecos.
Y, por otro lado, enfrentarse a las fuerzas saharauis, teniendo en cuenta que todo conflicto requiere una economía de guerra, y considerando la del PF/RASD, dada la Situación precaria de los campos de Tinduf, sin industria militar , dado el gasto diario en munición de artillería y cohetes que suponen sus acciones (además del gasto en combustible y otros elementos necesarios en el conflicto), así como material antiaéreo suficiente para, como afirma el Frente Polisario, frenar una posible acción aérea. Marruecos sin aviación, y, asimismo, la de la posible adquisición por su parte de material bélico tecnológico (posiblemente drones), ante su persistente actividad bélica se plantea la siguiente pregunta:¿cómo van a solucionar el problema logístico que supone? con el tiempo la necesidad de municiones ante tanto bombardeo diario de artillería, combustible, repuestos, alimentos y material sanitario necesario (dedicado también a atender a sus bajas de Covid-19) para la continuidad de la guerra si no cuentan con recursos externos. ¿apoyo? una pregunta a la que sólo se puede responder señalando el apoyo exterior prosaharaui, aún no del todo revelado (el 30 de septiembre, los saharauis anunciaron que su ejército, en el marco del acuerdo de defensa común con Argelia, recibirá armas de alta tecnología) .
Datos que acompañan a las estrategias contrapuestas, que deben contrastarse con la realidad del desarrollo del conflicto:
- Por un lado, el marroquí que renuncia (por el momento) a toda iniciativa y acción militar, estableciendo una defensa de resistencia apoyada en el muro con posibilidad de pasar a la ofensiva. , en su caso, sobre los territorios saharauis liberados aprovechando el nuevo armamento adquirido y la superioridad aérea que tiene para acompañar a sus vehículos blindados; una estrategia que no contempla actuar sobre los campamentos de Tinduf en Argelia ("santuario", reserva estratégica saharaui) o sobre posibles bases en Mauritania como inviable e inaceptable.
- Y, por otro lado, las fuerzas saharauis, que si bien, desde los años 1970 se especializaron en la guerra de guerrillas con el asesoramiento de la izquierda revolucionaria mundial, frente al muro marroquí repensaron la manera de hacer la guerra, dado lo que no hicieron fue la ocupación territorial, la preparación para una guerra convencional limitada siguiendo una estrategia de guerra de baja intensidad , intentando obligar al enemigo marroquí mediante un constante acoso artillero, día y noche, a perder la paciencia y cometer algún error que permitiera revertir la situación actual. Así, si la situación no cambia, los saharauis tienen la iniciativa y libertad de acción suficiente para llevar a cabo su actividad bélica de acoso; una estrategia que podría cambiar hacia la guerrilla objetivo si las fuerzas marroquíes inician el clásico enfrentamiento fuera del muro.
En definitiva, dado que la no indiferencia o la no imparcialidad de los vecinos se considera un suicidio estratégico, afectando de lleno a la convivencia y la paz regional, habrá que estar pendientes de la evolución. del conflicto y sus resultados. Convivencia y paz regional que, de momento, parecen aseguradas ante la no intervención de Marruecos en la "guerra saharaui".
Estrategias que podrían verse afectadas por la posibilidad de acción, basada en elementos infiltrados de ambos bandos tras las líneas enemigas, e incluso por la intervención de unidades de Al Qaeda del Islam. Magreb (AQMI) u otros grupos terroristas , lo que daría lugar a una intervención yihadista en el conflicto; Intervención, en este caso, no vinculada al Frente Polisario, como pretenden insistentemente las autoridades marroquíes con el objetivo, según los saharauis, de empañar su imagen en el contexto internacional mediante la difusión de tal idea en su prensa y en otros medios afines. internacionales.
La batalla diplomática por el Sáhara Occidental
Una guerra sin, de momento, intervención militar marroquí, que ha tenido, como precedente, y tiene actualmente, una guerra diplomática llevada a cabo de forma ininterrumpida hasta hoy por ambas partes buscando, en ambos casos, aquellos países y organizaciones de todo tipo que reconozcan sus respectivas posturas.
Así, Marruecos en treinta años ha logrado frenar su tesis, negándose a la autodeterminación, a ser debatida en el ámbito internacional , gracias a sus alianzas:socio privilegiado de España, Francia (país que no ha terminado de reconciliarse con Argelia debido a la guerra y el período colonial), EE.UU., Reino Unido, las monarquías de los países del Golfo Pérsico y decenas de países africanos. países (cuarenta y uno de ellos retiraron el reconocimiento de la RASD como Estado), con países latinoamericanos, así como acuerdos comerciales establecidos desde 2000 (prorrogados en 2016 con la visita del rey Mohamed VI al Kremlin), con Rusia (país , amigo de Argelia, que ha criticado la decisión de Donald Trump respecto a la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara) y, igualmente, con China (país que entregará las vacunas anti-Covid).
De esta manera, se cumple el objetivo de que el Sahara sea reconocido internacionalmente como territorio marroquí (“cuestión existencial”) se ha logrado gracias a las mencionadas relaciones privilegiadas, junto con su cooperación con Israel desde los años 60 y el reciente acuerdo establecido con EE.UU. bajo la presidencia de Donald Trump; En este sentido, de cara a Occidente, sin ser un país importante en recursos económicos, la posición estratégica de Marruecos en el Estrecho de Gibraltar (control y vigilancia), la facilidad de paso por su espacio aéreo en caso de guerra y ser un país clave en el control de los flujos migratorios hacia Europa desde África. El precio a pagar por su ayuda:el Sahara.
Acuerdos que han proporcionado a Marruecos, a pesar de la actual situación saharaui presión armada (“su” guerra) una sensación de euforia y poder geopolítico y geoestratégico como no había logrado antes, motivo de su contundencia beligerante y diplomática con todos aquellos países que se manifiestan contra sus tesis soberanistas (ahora avaladas por EE.UU.) sobre el Sáhara Occidental; y más, al lograr aumentar su presencia diplomática en América Latina, haciendo que algunos países que antes reconocían a la RASD dejen de hacerlo y otros apoyen su tesis del proyecto de autonomía para el Sahara frente al referéndum (además, en los últimos cinco años las embajadas latinoamericanas en Rabat han pasado de cinco a doce).
En este contexto de "batalla diplomática" entre Rabat y la RASD, la búsqueda por parte de los saharauis del reconocimiento de su existencia ha sido constante (actualmente reconocen a la RASD más de 80 países, entre los que no se incluyen España ni la UE ) tanto desde el plano cultural, académico, de amistad social, diplomático (con la apertura de delegaciones y asociaciones de amistad) en todo el mundo, aunque con resultados inferiores a los logrados por Marruecos, como desde el desarrollo de campañas internacionales de recogida de firmas. (especialmente en España), el último durante la actividad bélica del 26 de enero de 2021, con un manifiesto bajo el lema "El Sahara no está en venta", en el que denuncian toda explotación de sus recursos y ataques a sus Derechos. Asimismo, actualmente, ha buscado que la prensa internacional rompa el silencio marroquí sobre su política expansionista y la guerra, y que la comunidad internacional reaccione ante la ola de represión violenta que están sufriendo los saharauis de los territorios ocupados por parte de Marruecos. como forma de represalia por el conflicto armado. Acciones diplomáticas que actualmente se intensifican con una gira de reuniones diplomáticas con fuerzas políticas europeas (incluida la española), junto con la presencia explicativa de la situación en todo tipo de foros por parte de líderes saharauis.
En concreto, en este camino, el Frente Polisario sigue buscando, por todos los medios posibles, además del acoso armado, una manera de que Marruecos pierda la paciencia e intervenga abiertamente en el conflicto. conflicto o que la comunidad internacional inste a Rabat a responder lo antes posible a su petición permanente respaldada por la ONU de celebrar un referéndum. Con tal propósito, ha denunciado:
- Ante la ONU, la no designación de un enviado especial para la zona resolver la disputa RASD-Marruecos; puesto vacante desde 2019, que de cubrirse permitiría a la ONU hacerse cargo de la búsqueda de una solución a la disputa. Una denuncia que parece haber surtido efecto dado que, a finales de agosto de 2021, ha sido nombrado el ruso Alexander Ivanko, con experiencia previa en la materia como jefe de gabinete de la MINURSO desde 2009.
- Ante la comunidad internacional, la continua represión marroquí ejercidas por las "autoridades de ocupación" sobre los activistas saharauis de los territorios ocupados (y sobre los no saharauis relacionados), hechos que, en casos concretos, están siendo investigados por la organización internacional Human Rights Watch (HRW) y que no han sido reconocidos por las autoridades marroquíes. Medidas sobre estos activistas a las que hay que añadir que, en general, la expulsión del país se aplicó a algunos activistas extranjeros "molestos" para Rabat; Caso, por ejemplo, entre otros, de Helena Maleno, activista española especializada en migraciones y fundadora de la organización Caminando Fronteras, que ha denunciado a Marruecos por su "violenta" deportación a España tras dos décadas de vivir en el país (expulsiones que siguen que se está produciendo actualmente junto con el rechazo a la entrada en el país de partidarios de la causa saharaui).
- Asimismo, ha denunciado el silencio, la mentira y la falta de información sobre la guerra por parte de Marruecos (y gran parte de la comunidad internacional), que ha activado el desarrollo de los medios de comunicación saharauis con el objetivo de responder adecuadamente a la guerra mediática. Un ejemplo es el nacimiento el 24 de marzo de 2021 del Twitter de la Voz Saharaui como “la ventana (una más) del Sáhara Occidental al mundo rompiendo el bloqueo mediático” al que están sometidos tras romperse el alto el fuego. Así, según los saharauis, con este “ambicioso proyecto de comunicación [pretenden] ofrecer información rigurosa y profunda para ayudar en la batalla comunicativa que se libra también por la libertad del Sáhara Occidental.
- También ha denunciado laventa de armas a Marruecos en plena guerra (acusando también a España).
- Así como la explotación continua de los recursos de dichos territorios por parte de diversas empresas internacionales (entre ellas algunas españolas) con el visto bueno marroquí (empresas a las que se advierte del peligro que corren al estar situadas en territorio en guerra; último aviso a principios de octubre). En este ámbito, dos sentencias recientes del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE), que impiden a los pescadores de la UE pescar con permisos marroquíes en aguas saharianas e impiden que las exportaciones agrícolas del Sahara queden excluidas de los aranceles preferenciales de la UE, avalan la posición saharaui respecto a las indicadas explotación.
Al mismo tiempo, han sugerido un cambio de estrategia (que no especifican) “con nuevas operaciones militares especiales de fondo y calidad militar” con la adquisición de nuevas tecnologías armamentísticas.; advierten al régimen marroquí que “lo peor y más duro de la guerra está por llegar”. Amenazando al mismo tiempo con una posible extensión del conflicto a la región norteafricana con la supuesta intervención armada de algunos países norteafricanos (asunto no confirmado).
Asimismo, instan al Gobierno español a través de la sociedad española, declarada amiga del pueblo saharaui, a ponerse de su lado dejando de prestar atención al "chantaje" de Rabat; y presionar diplomáticamente a los países de la UA, UE... para que rechacen la declaración de Trump sobre la soberanía marroquí sobre el territorio sahariano de la RASD y declarar ilegales los consulados establecidos en los territorios ocupados, dado que el nuevo presidente de EE.UU., Joe Biden, no ha rechazado aún tal declaración, ni parece que lo hará dada la reciente posición (principios de mayo) del administración Biden, sin planes de revertir la declaración de Trump, reconociendo el Sáhara Occidental como marroquí.
Un indicio de ello parece ser el anuncio de las maniobras anuales “Africa Lion” (León Africano), habitualmente organizadas entre EE.UU. y Marruecos en este país, que tendría lugar en 2021, entre el 7 y el 18 de junio, por primera vez, según Marruecos, en los territorios ocupados (aspecto muy publicitado por la prensa marroquí) llegando hasta las localidades de Mahbes (localidad cercana al muro que ya fue bombardeado por los saharauis), Tantan y Agadir. Maniobras que, en este caso, por el supuesto lugar de actuación y la presencia de fuerzas de EE.UU. y otros países, supondrían una intervención no armada del Ejército saharaui en la zona para evitar un conflicto internacional. Hay que tener en cuenta que el logo de tales maniobras, elaborado por Rabat, presenta un mapa que engloba el territorio saharaui. Sin embargo, las fuerzas saharauis no han dejado de actuar, según sus informes de guerra, en Mahbes, con el presunto objetivo de prohibir o limitar las citadas maniobras. Maniobras que al final, según el portavoz del Mando Central de AFRICOM, se realizaron al norte de la frontera entre Marruecos y los territorios saharauis ocupados (50 km al oeste de Tinduf) sin llegar a los citados territorios ocupados. España, por su parte, en plena crisis diplomática con Marruecos, declinó la invitación de Estados Unidos para participar en tales ejercicios militares.
Ante esta situación, la respuesta saharaui a la "marrocanización" del Sahara por parte de EE.UU. se apresuró a solicitar a nivel internacional que dicho país respete lo establecido por la ONU, declarando que tal reconocimiento es una flagrante violación del Derecho Internacional, al tiempo que denunció como un error la instalación de un Consulado de Estados Unidos en Dakhla y movilizó en el ámbito internacional a todos aquellos, incluidos ex políticos americanos de cierto nivel, que están a favor de la autodeterminación del Sahara, a la espera de que el nuevo presidente Joe Biden modifique las decisiones adoptadas por Donald Trump.
Conflicto en el que España , a pesar de los continuos indicios de que tiene una responsabilidad histórica y jurídica en el Sáhara Occidental, incluso por parte de la ONU que reconoce a dicho país como "potencia administradora", se ha puesto del lado de la UA, la UE, la ONU y la MINURSO, apelando a los contendientes a mostrar una sentido de responsabilidad y moderación, con el fin de buscar una solución política y pacífica al conflicto actual, así como a la base contenciosa mediante el desarrollo de un referéndum de autodeterminación.
Manifestaciones que son indiferentes a la parte saharaui que no espera nada de España (a pesar de haber sido hace tiempo su 53ª provincia) al considerar que está sujeta al chantaje marroquí; Un chantaje que, lógicamente, la actual embajadora de Marruecos en España, Karima Benyoich, desmiente, señalando que tal acusación no es realista ya que Marruecos no es un país oportunista. , que no es fácil detener a las mafias, que Marruecos tiene también una presión migratoria muy alta, y que es un país de acogida con unas políticas de migración y asilo que han regularizado a millas de personas. No obstante, a pesar de tal manifestación, hay que contar, por parte marroquí, con las acciones de influencia bajo presión ejercida por las migraciones masivas de ilegales sobre Canarias y sobre las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla (negadas como españolas por Marruecos) buscando provocar una crisis político social como forma de desviar la atención sobre el conflicto con los saharauis.
Añadir a lo expuesto el retraso de la Reunión de Alto Nivel (RAN) España-Marruecos que estaba prevista para el 17 de diciembre de 2020, bajo el pretexto de la pandemia ocultando así su verdadera razón:la oposición marroquí “ultrasensible” a las consideraciones españolas, en boca de la, en aquel momento, ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, respecto al conflicto saharaui apoyando las resoluciones de la ONU y las del entonces viceministro, Pablo Iglesias, a favor de los saharauis, así como, haber acogido, en pleno conflicto al líder del FP, por razones estrictamente humanitarias (hecho silenciado por los saharauis y por España); Líder Que, Además, Tiene Causa Abierta en la Audiencia Nacional por torturas y desaparatos de desidentes en los Campos de Refugiados Entre 1976 y 1987 (Acusaciones Vértidas en Su Día por la AsociaciónaNaui de Defensa de Los Derechos Humanos y Por laociaciaciaciaciAnAnAnAdAnAnAdAnAnAdAnAdciAnTAdAnAdTAdAnciAnTAdAdTAdAnTAnTAnTAdAnciAnTAdAnciAnAtciCiAt Del Terrorismo) y por la que Fue Convocado A Declarar.
situación de conflicto en la que españa no ha aportado soluciones diplomáticos origines, pero empuja a tomar cuenta del problema traga Tras cuarenta y tres años de inaccion; Así, Tras la Investidura de Biden, La Ministra de Asuntos Exteriores y Cooperación, En Funciones en Aquel Momento, Arancha González Laya , pecado pedir a los eeuu el Cambio de posura Sobre la decisión de la administración de Donad Trump afirmando la soberanía de marruecos Sobre el sáhara, pidio se retomara el proceso del sáhara y que lao la onu nombrara ya un enviado para dichos territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio territorio en situaciaciA Vacante Desde Hace 18 Meses. Postura que Ha Sido Respondida, Indirectamento, Por Marruecos, Con la Sugerencia de Que Sus Relaciones Con España dependen de Que el Gobierno Español “Emule a Eeuu” Respondando Con Claridad Su Propuesta de SOSUCIÓN Para El Sáhara:Una Autonomía Limitada BaJo La SoBeran de la Soceuí de la Soceuí de la Socera de la Socera de la Marrina de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera de la Socera.
no obstante, la situación expuestera ha cambiado un tanto ante la reciente (Finales deero de 2021) Indicación De la Entonces Ministra de Asuntos Exteriores, Admitido por Primera Vez la existencia de Enfentamiento Bélico Entre los Ejércitos Saharaui y Marroquí, Al Tiempo Que, Preocupada por el Conflmo, Dice apoyar los Esfuerzossos de la onu para solucionario el fin del Mismo (afirmaciones recogidas con satisfacción
Así Pues, España, Considerando y de Momento que la administración de la biden no dará marcha atrás de forma completa respetó un la plateado por trump , Sigue, Como vemos manteniendo su tradicional política de neutralidad positiva, dando la impresión, eneCasiones, de que está un favor de marruecos (y por lo tanto en divergencia con los saharauis) y en otras en su contrab Ejerza Marruecos, Que Mantiene Contra Viento y Marea Su Postura de Anexión de la Excolonia Española, Postura Que no Parece que Vaya A Cambiar.
en elvo marroquí de la balanza, el debate Sobre ceuta y melilla, el control de la Inmigración de Irregulares Desde su País, El apoyo para la prevención de Ataques Terroristas y la reunión de Alto Nivel (Ran), y para Equilibrar, La Espera de Que España Cambie de Posiciónica y Apoye la Tesis Soberanista Marroquí Sobre El Sáhara Reconocida en Su Día Por El Exresidente de Los Eeuu, Donald Trump.
así, no extraña que, tanto marruecos como la rasd, pidan a españa Claridad en cuanto a su posiciono en la verdadera situaciónica. Y más, en su Momento, parte marroquí al Saber Que El Líder Del Frente Polisario, Brahim Gali, En Pleno Conflictto, Ingreso Enfermo de Covid en Un Hospital Español.
actitudes Todas que, en su conjunto, al Menos de Momeros, Parecen Quitar Hierro Al Conlacto Armado Abierto, Llegando A Pensar Que los Plateamientos Saharauis, Expueestos Colo Objetivos A Alcanzar Con El Misso , no sean tan a través de Como el Frente Polisario Presupone en Sus Canales de Comunicacia; Tanto que, en Diferentes Medios se Ha Llegado un hablar de "fracaso saharaui" o de "la Última Batalla Perdida del Frente Polisario" .
no obstante, así las cosas, fuera de las realidades e hipótesis plateadas, habrá que esperar a que la evolució de los acontecimientos nos presente la valoraciónón de los resultados de alcanzan cada una de Las Partes en ConlactO.