Historia antigua

Juan Navarra

Jean Marie Dominique Navarre, más simplemente llamado Jean Navarre, nació el 8 de agosto de 1895 en Jouy-sur-Morin en Seine-et-Marne y fue uno de los ases de la Primera Guerra Mundial. Era hijo de un gran fabricante de papel y hermano gemelo de Pierre, en una familia que incluía once hijos.

Muy indisciplinado en su juventud, expulsado sistemáticamente de los colegios a los que frecuentaba, como su hermano Pierre, fue confiado en 1910 a un tutor, el Abbé Barges, luego enviado a una pensión inglesa y nuevamente confiado al Abbé después de su fuga de Inglaterra. Cansado de su mala conducta, su padre lo hizo ingresar a la fábrica donde no permaneció. El joven Jean asistió luego a una escuela de mecánica de la que fue expulsado y luego, en 1913, a una escuela técnica. Luego alimentó el proyecto de ingresar en la Escuela Superior de Aeronáutica, habiendo adquirido junto con su hermano Pierre una gran admiración por la naciente aviación.

En junio de 1914 ingresó en la escuela aeronáutica de los hermanos Caudron, constructores de aviones, dos meses antes de que estallara la guerra. Al amparo de mentiras sobre su edad y su capacidad para volar, logró incorporarse al ejército, en la base de Saint-Cyr-l'École, para convertirse en piloto. No tiene ninguna patente civil, pero es obligatorio para ser contratado. Terminado su aprendizaje en Lyon-Bron, fue destinado a un escuadrón equipado con Farman, fue despedido por indisciplina y se encontró en Villacoublay para aprender a pilotar el Morane-Saulnier.

A principios de 1915 se unió en Muizon, cerca de Reims, a un escuadrón de reconocimiento y caza, el M.S.12. El 1 de abril, con su compañero de equipo, el segundo teniente Robert, experimentó su primer éxito, obligando a un avión alemán a aterrizar en las líneas francesas. Es nombrado sargento y recibe la medalla militar. Durante el mismo mes obtendrá 6 victorias, de las cuales sólo 2 serán aprobadas. Luego, en junio, después de completar tres "misiones especiales" detrás de las líneas enemigas, recibió la Legión de Honor.

En la primavera de 1916, Jean Navarre participó valientemente en la gran batalla de Verdún, atacando aviones alemanes sin importar su número, olvidándose muchas veces de pedir permiso para despegar. Luego lo apodaron:"Navarra, el centinela de Verdún". El 1 de abril fue nombrado subteniente e ingresó en el club de los ases (pilotos con más de 5 victorias aprobadas). Una de sus técnicas consiste en atacar las ruedas en el aire, aprovechando la sorpresa del enemigo para ametrallarlo.

Cuando no está volando, a Navarre le encanta salir de fiesta, bebe demasiado y comete muchas bromas, por lo que con frecuencia (pero muy temporalmente) termina arrestado o en prisión. De hecho, el hombre no teme a nadie, ni a los alemanes ni a su jerarquía. En mayo de 1916, fue el primer piloto francés en contar 10 victorias aprobadas (victorias de las que hay varios testigos o cuando el avión enemigo retrocedió hacia las líneas francesas). Estos serán sus últimos combates porque en junio resulta gravemente herido en un duelo sobre las Ardenas, pero logra aterrizar su avión en Sainte-Menehould. Tiene entonces 12 victorias aprobadas pero en realidad ha obtenido más del doble. Unos cinco meses después, el 15 de noviembre de 1916, volvió a sentirse muy afectado por la muerte en combate de su hermano gemelo, Pierre, que lo había seguido en el ejército del aire. Bebiendo mucho, nervioso y muy agotado, reanudó su formación en 1917, pero tuvo que ir a una casa de reposo. Sólo se encontró en condiciones de volar en 1918, cuando se firmó el armisticio. Sin su accidente, es casi seguro que Navarra habría igualado el número de victorias de un René Fonck o un Guynemer.

Terminada la guerra, Navarra se niega a abandonar la aviación y alimenta varios proyectos, cada uno más loco que el otro, pero que no tendrán tiempo de ver la luz. Contratado como piloto jefe en Morane-Saulnier, realiza vuelos de demostración para clientes en el aeródromo de Villacoublay, pero también es piloto de acrobacia cuyas exhibiciones vienen a admirar desde lejos. El destino de Jean Navarre iba a terminar el 10 de julio de 1919, pero durante un descenso en planeador su avión chocó contra el muro de una granja cercana al aeródromo. Navarra fue asesinada. Aún no tenía veinticuatro años. Descansa en el cementerio de Tartas, en las Landas.

Su padre, André Navarre, es el fundador de las fábricas de papel de Navarra


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