La operación "Cottage" tenía como objetivo recuperar la isla Kiska del grupo Aleutiano de manos de los japoneses. Una de estas islas era Kiska, una isla helada y deshabitada al este de Alaska.
Los japoneses capturaron la isla Kiska el 7 de junio de 1942. El desembarco fue realizado por 500 marines al mando del capitán Takeji Ono. Solo había una estación meteorológica estadounidense en la isla con 10 hombres. Dos de los estadounidenses murieron y ocho fueron capturados.
Luego llegaron a la isla otros 2.000 japoneses liderados por el contralmirante Akiyama. Posteriormente estas fuerzas fueron reforzadas con artillería antiaérea, ingenieros e infantería adicional.
Operación de recaptura
El 11 de mayo de 1943, los estadounidenses desembarcaron en la isla de Atou, en el grupo de las Aleutianas. Se produjo una feroz batalla con la guarnición japonesa de 2.900 hombres. Los estadounidenses prevalecieron pero sufrieron 3.500 bajas.
Los estadounidenses esperaban una resistencia similar en la isla de Kiska. Después de la reconquista de Atou, los japoneses se dieron cuenta de que tampoco podían retener Kiska y comenzaron a planificar la retirada de sus fuerzas.
Así que a partir de julio de 1943 comenzaron a retirar sus fuerzas. Los estadounidenses tenían información, a través de reconocimiento aéreo, de que la actividad japonesa en la isla era nula al igual que el tráfico en el puerto.
Los daños causados también por los ataques aéreos que llevaron a cabo no fueron reparados mientras los aviones estadounidenses operaban casi sin ser molestados por los antiaéreos japoneses. El 28 de julio de 1943 cesó el envío de señales japonesas desde Kiska.
Sin embargo, los estadounidenses no atribuyeron todos estos signos a la retirada de los japoneses, sino a la escasez debida al cese de su suministro. Así que planearon una campaña normal para recuperar la isla esperando pérdidas significativas. En esto se confirmaron, pero de forma diferente a la esperada.
El 15 de agosto de 1943, la 7.ª División de Infantería (IP) estadounidense junto con la 13.ª Brigada de Infantería (IBC) canadiense desembarcaron en la isla de Kiska, en la costa opuesta. Este fue uno de los errores de organización ya que, en ausencia de japoneses, los estadounidenses y los canadienses comenzaron a dispararse entre sí pensando que estaban golpeando al enemigo (inexistente).
En uno de esos conflictos murieron 28 estadounidenses y cuatro canadienses, mientras que 50 hombres más de ambos ejércitos resultaron heridos. El único adversario real fueron las minas y trampas explosivas que dejaron los japoneses. Pero también hubo accidentes y explosiones de municiones.
El destructor estadounidense USS Abner Read incluso chocó contra una mina marina japonesa, perdiendo 118 de sus hombres (71 muertos), además de su popa. En total, los aliados sufrieron más de 315 bajas... sin oposición.
Por supuesto, todo esto podría haberse evitado si alguien de alto rango se hubiera molestado en ordenar un reconocimiento cercano de la isla antes…