Los primeros habitantes de Roma fueron los latinos, un pueblo itálico que se estableció en la zona alrededor del río Tíber en el centro de Italia en el siglo X a.C. A los latinos se unieron otros pueblos itálicos, incluidos los sabinos y los etruscos, y juntos formaron el Reino Romano.
El Reino Romano
El Reino Romano fue fundado en 753 a. C. por Rómulo y Remo, hermanos gemelos de quienes se decía que fueron criados por una loba. El reino duró más de 200 años y durante ese tiempo los romanos expandieron su territorio y conquistaron a muchos de los demás pueblos de Italia.
La República Romana
En 509 a. C., el Reino Romano fue derrocado y se estableció la República Romana. La república era un gobierno en el que el pueblo elegía representantes para servir en el Senado, que dictaba leyes y gobernaba el estado romano. La república duró más de 400 años y durante ese tiempo los romanos conquistaron gran parte del mundo mediterráneo, incluidos Grecia, Egipto y Cartago.
El Imperio Romano
En el año 27 a. C., la República Romana fue reemplazada por el Imperio Romano. El imperio estaba gobernado por un único emperador, que tenía poder absoluto. El imperio duró más de 400 años y durante ese tiempo los romanos alcanzaron la cima de su poder e influencia.
La caída del Imperio Romano
En 476 EC, el Imperio Romano Occidental cayó en manos de las tribus germánicas. El Imperio Romano de Oriente continuó existiendo durante otros 1.000 años, pero gradualmente fue perdiendo poder e influencia.
El legado de Roma
El Imperio Romano tuvo un profundo impacto en la civilización occidental. Los romanos desarrollaron muchas instituciones políticas, legales y culturales importantes que todavía se utilizan en la actualidad. El Imperio Romano también extendió el cristianismo por toda Europa y el mundo mediterráneo.