Terrazas
Los aztecas construyeron terrazas en las laderas de colinas y montañas para crear superficies niveladas para plantar. Esto les permitió cultivar en áreas que de otro modo serían demasiado empinadas para el cultivo. Las terrazas también ayudaron a prevenir la erosión y conservar el agua.
Riego
Los aztecas utilizaban el riego para regar sus cultivos, especialmente durante la estación seca. Construyeron canales y acueductos para llevar agua de ríos y lagos a sus campos. También utilizaron un sistema de camas elevadas para ayudar a distribuir el agua de manera uniforme.
Rotación de cultivos
Los aztecas practicaban la rotación de cultivos para mantener la fertilidad del suelo. Sembraban diferentes cultivos en el mismo campo en años sucesivos, lo que ayudaba a evitar que el suelo se quedara sin nutrientes.
Variedades de cultivos
Los aztecas cultivaban una amplia variedad de cultivos, incluidos maíz, frijoles, calabazas y tomates. El maíz era el cultivo más importante y se utilizaba para hacer tortillas, tamales y otros platos. Los frijoles también eran un alimento básico y, a menudo, se cocinaban junto con el maíz. La calabaza se utilizaba en sopas, guisos y otros platos. Los tomates se utilizaban en salsas y salsas.
Los aztecas también cultivaban una variedad de otros cultivos, incluidos chiles, aguacates y cacao. Los chiles se usaban para agregar especias a la comida, mientras que los aguacates se usaban en guacamole y otros platos. El cacao se utilizaba para hacer chocolate, que era una bebida popular entre los aztecas.
El sistema agrícola azteca era un sistema altamente eficiente y productivo que sustentaba a una población grande y en crecimiento. Los aztecas pudieron lograr altos rendimientos mediante el uso de una variedad de técnicas, incluidas la construcción de terrazas, el riego y la rotación de cultivos. También utilizaban una variedad de plantas, como maíz, frijoles, calabazas y tomates.