La máscara de woyo fue utilizada por el pueblo Baoule de Costa de Marfil para encarnar espíritus durante las danzas rituales. Estas danzas eran una parte integral de las ceremonias religiosas Baoule y se creía que conectaban a los participantes con el mundo de los espíritus. La máscara woyo, con su elaborado diseño y significado espiritual, jugó un papel central al facilitar esta conexión y fomentar un sentido de unidad y reverencia dentro de la comunidad Baoule.