La Ley Dawes de 1887 tenía como objetivo asimilar a los nativos americanos a la sociedad en general dividiendo las tierras tribales en asignaciones individuales. El acto tuvo varias consecuencias:
1. Pérdida de Tierra :La Ley Dawes provocó la pérdida de millones de acres de tierras de nativos americanos. Muchos nativos americanos se vieron obligados a vender sus parcelas debido a dificultades financieras o coerción. Como resultado, las tribus nativas americanas perdieron una parte importante de sus territorios tradicionales.
2. Alteración de los estilos de vida tradicionales :La Ley Dawes trastocó los estilos de vida y las economías tradicionales de los nativos americanos. Muchas tribus dependían de la propiedad comunitaria de la tierra y de la agricultura de subsistencia, y el cambio a parcelas individuales socavó sus prácticas culturales y económicas.
3. Asimilación cultural :La Ley Dawes tenía como objetivo promover la asimilación de los nativos americanos a la sociedad euroamericana. Se alentó a los nativos americanos a adoptar la propiedad individual, el cristianismo y una educación al estilo occidental, a menudo a expensas de sus propias prácticas y creencias culturales.
4. Aumento de la pobreza :La pérdida de tierras y la alteración de las economías tradicionales provocaron un aumento de la pobreza entre las comunidades nativas americanas. Muchos nativos americanos se volvieron dependientes de la asistencia del gobierno y lucharon por mantener su autosuficiencia cultural y económica.
5. Creación de nativos americanos sin tierra :Muchos nativos americanos que vendieron o perdieron sus parcelas se quedaron sin tierras, lo que generó mayores desafíos económicos y sociales. Enfrentaron dificultades para encontrar vivienda y empleo estables, lo que contribuyó a la marginación de las comunidades nativas americanas.
6. Resistencia y Reforma :La Ley Dawes provocó resistencia y activismo entre las tribus nativas americanas. Varios líderes y organizaciones de nativos americanos surgieron para defender sus derechos y soberanía. Al final, la Ley Dawes fue reemplazada por la Ley de Reorganización Indígena de 1934, que adoptó un enfoque diferente para la gestión de la tierra y el autogobierno de los nativos americanos.