- Levántese temprano, a menudo antes del amanecer.
- Realizar sus abluciones matutinas, que normalmente implicaban lavarse la cara y las manos con agua fría.
- Vestirse ella y sus hijos, en su caso.
- Asistir a misa, si es posible.
- Preparar el desayuno para ella y su familia.
Tarde en la mañana
- Participar en tareas domésticas, como limpiar, cocinar y lavar la ropa.
- Gestionar el servicio del hogar y supervisar la realización de las tareas.
- Atender a los invitados que hayan podido llegar.
- Administre sus finanzas, incluido el pago de facturas y el seguimiento de ingresos.
Tarde
- Almuerzo
- Bordar, coser o tejer.
- Escribir cartas
- Jugar o socializar con otras mujeres.
- Salir a caminar o realizar algún tipo de actividad física.
Tarde
- Cena
- Pasar tiempo con su familia, incluso jugando, contando cuentos o cantando canciones.
- Asistir a cualquier tarea nocturna, como acostar a los niños o prepararse para el día siguiente.
- Relájese y pase un rato de tranquilidad antes de retirarse a pasar la noche.