Cortés nació en Medellín, en el Reino de Castilla, Corona de Castilla, parte de la España moderna. Llegó al Caribe durante la colonización española de América y participó en la conquista de Cuba al mando de Diego Velázquez de Cuéllar. Fue nombrado capitán de la tercera expedición a tierra firme en 1519 y desembarcó cerca de la actual ciudad de Veracruz. Allí hizo alianzas con grupos indígenas, en particular los totonacas y texcocanos, a quienes les molestaba el dominio azteca y le brindaron apoyo para su avance hacia el corazón de los aztecas.
Cortés y sus hombres marcharon hacia Tenochtitlán, la capital azteca, en noviembre de 1519. Los aztecas inicialmente dieron la bienvenida a los españoles, pero las tensiones pronto aumentaron. En junio de 1520, los aztecas expulsaron a los españoles de Tenochtitlán en lo que se conoció como La Noche Triste (la "Noche de los Dolores"). Cortés se reagrupó y, con la ayuda de aliados indígenas, sitió Tenochtitlán en mayo de 1521. Después de un asedio de 80 días, los aztecas se rindieron el 13 de agosto de 1521.
La conquista del Imperio Azteca por parte de Cortés fue un punto de inflexión significativo en la colonización española de América. Estableció el dominio español sobre un vasto territorio y allanó el camino para una mayor exploración y conquista española en la región. Sin embargo, la conquista también estuvo marcada por una violencia brutal y la destrucción de muchas civilizaciones indígenas.
Después de la conquista, Cortés se convirtió en el primer gobernador de Nueva España, la colonia española establecida en México. Posteriormente fue marginado por rivales políticos y regresó a España en 1528, donde pasó el resto de su vida.