Si los neandertales habrían llegado a latitudes tan al norte como Escandinavia es una cuestión que los científicos han debatido durante muchos años. La tesis que prevalece hasta el momento es que nunca llegaron allí, básicamente porque el tiempo no lo permitió, hacía demasiado frío.
Pero un nuevo estudio indica lo contrario, diciendo que las temperaturas no fueron lo suficientemente extremas como para detener a los neandertales, y que los neandertales podrían haber llegado más al norte que el paralelo 55. El hecho de que nunca se hayan encontrado restos de neandertales al norte de ese paralelo se debería a un sesgo tafonómico. La tafonomía es una parte de la paleontología que estudia los procesos de fosilización y la formación de yacimientos de fósiles. No todos los organismos tienen las mismas posibilidades de fosilizarse y conservarse en diferentes épocas y diferentes lugares, ya que hay muchos factores que entran en juego.
El equipo detrás del estudio, dirigido por la estudiante de doctorado en arqueología prehistórica de la Universidad de Aarhus, Trine Kellberg Nielsen, utilizó modelos climáticos para determinar si los neandertales habrían podido sobrevivir o no en el sur de Escandinavia.
Desde el punto de vista climático, el estudio afirma que los neandertales podrían haber vivido perfectamente en el sur de Escandinavia hace unos 120 mil años. Sin embargo, no descartan la posibilidad de que otro tipo de barreras físicas les hubieran impedido avanzar tan al norte. En aquella época el nivel del mar era más alto que ahora, por lo que es posible que nunca cruzaran hacia el norte desde la actual Dinamarca.
Hay pruebas de que habitaron el norte de Alemania, justo al sur de la actual frontera danesa, y que eran tremendamente adaptables y flexibles, como lo demuestra su supervivencia a 300.000 años de violentas fluctuaciones en el clima y el medio ambiente. El estudio no afirma claramente que se expandieron más al norte, pero sí que las condiciones no fueron del todo desfavorables.
Fuentes
CienciaNórdica