Al este de China, en lo que hoy es la provincia de Henan, se han encontrado más de 100 yacimientos prehistóricos, denominados colectivamente Cultura Peiligang. . Esta cultura se desarrolló en la zona entre el 7.000 y el 5.000 a.C., y es una de las más antiguas de China en producir cerámica. El nombre proviene del primer asentamiento descubierto en 1977 en la ciudad de Peiligang.
Un poco más al sur, en Jiahu, se encontró en 1999 otro yacimiento neolítico. Algunos investigadores lo consideran parte de la cultura Peiligang, dadas las numerosas similitudes entre los asentamientos. Pero otros dicen que las diferencias son lo suficientemente sustanciales como para considerar a Jiahu como una cultura diferente. Por ejemplo, el hecho de que es el único de todos los sitios donde hay evidencia de cultivo de arroz. Y, de hecho, Jiahu es anterior a los asentamientos de Peiligang en varios siglos.
Pero Jiahu es especial para otro hallazgo. Durante las excavaciones se encontraron varios caparazones de tortuga, enterrados junto a restos humanos, en 24 tumbas. Lo peculiar de las conchas es que en ellas tenían símbolos tallados, que datan entre el 6600 y el 6200 a.C. Esto precedió a las primeras formas de escritura mesopotámica en más de 2.000 años.
Se identificaron un total de 16 símbolos diferentes, sin que hasta el momento se haya descifrado su significado. Algunos expertos creen que guardan similitudes con un sistema de escritura utilizado miles de años después, durante la dinastía Shang (1700-1100 a. C.), conocido como los huesos oraculares. . Pero otros los consideran protoescritura, es decir, símbolos que no pueden considerarse como escritura en sí, sino que pueden ser el origen de su desarrollo.
Los Huesos Oraculares Son más de 200.000 omóplatos de animales y caparazones de tortuga sobre los que se encontraron inscripciones, considerado el corpus más antiguo de escritura china arcaica, y que, tras ser descifrado, reveló importante información histórica, como la genealogía completa de la dinastía Shang. P>
Los signos que representan el ojo y el sol en los huesos del oráculo , por ejemplo, podría derivar de uno de los símbolos Jiahu. Asimismo, se ha propuesto la presencia, a modo de comparación, de los numerales 8 y 20. Pero son sólo hipótesis que no son compartidas por todos los historiadores. Los más de 5.000 años de distancia en el tiempo desde los símbolos de Jiahu hasta los huesos oraculares dificultarles la conexión.
Junto a las conchas de Jiahu también se encontraron multitud de pequeños guijarros agrupados. Los investigadores propusieron en la presentación del descubrimiento en 2003 que las conchas podrían haber contenido originalmente las pequeñas piedras, siendo utilizadas como una especie de sonajeros en rituales chamánicos.
Pero Jiahu todavía tendría otra sorpresa reservada para los arqueólogos. En las mismas tumbas donde se encontraron las conchas, se encontraban flautas hechas de huesos, consideradas hoy los instrumentos musicales más antiguos que se conocen.