Rivalidades políticas: Antonio formó parte del Segundo Triunvirato junto a Octaviano y Lépido, pero su alianza era a menudo frágil debido a rivalidades personales y ambiciones políticas. Octavio, en particular, se mostró cauteloso ante el creciente poder de Antonio y maniobró constantemente para socavar su influencia.
Conflictos militares: Las campañas militares de Antonio estuvieron marcadas tanto por victorias como por derrotas. Sus primeras victorias contra las fuerzas de Pompeyo y los partos solidificaron su posición, pero su desastrosa expedición contra los partos en el 36 a. C. resultó en grandes pérdidas. Estos fracasos militares dañaron su reputación y debilitaron su posición política.
Amor con Cleopatra: La historia de amor de Antonio con la reina egipcia Cleopatra VII jugó un papel importante en su caída. La influencia de Cleopatra sobre Antonio lo llevó a cometer errores de juicio políticos y a distanciarse de sus partidarios en Roma. Octavio aprovechó este asunto para presentar a Antonio como un traidor a Roma y lo utilizó como propaganda en su contra.
Los movimientos estratégicos de Octaviano: Octavio, un político y estratega astuto, siempre superó a Antonio en la lucha por el poder entre los dos. Octavio desmanteló efectivamente el Segundo Triunvirato formando alianzas con sus antiguos enemigos y aislando a Antonio. Se ganó hábilmente el apoyo del Senado romano y del pueblo al presentar a Antonio como una amenaza a los valores y tradiciones romanos.
Dificultades financieras: Las campañas militares de Antonio requirieron recursos sustanciales y agotaron el tesoro. Sus gastos generosos y su asociación con Cleopatra afectaron aún más las finanzas de Roma, creando resentimiento entre el pueblo romano y dañando su credibilidad como líder responsable.
Falta de apoyo político en Roma: La ausencia de Antonio de Roma durante largos períodos debilitó su base política. No logró mantener vínculos fuertes con el Senado, lo que permitió a Octavio consolidar el poder e influir en la opinión pública en su contra.
Traición de los aliados: Los aliados de Antonio, incluidos algunos de sus amigos más cercanos y generales, desertaron al lado de Octaviano cuando las tensiones entre los dos líderes se intensificaron. Esta pérdida de apoyo debilitó aún más la posición de Antonio y contribuyó a su derrota final.
A pesar de sus habilidades como líder militar y orador, Marco Antonio luchó contra una combinación de maniobras políticas, adversarios militares, conflictos personales y errores estratégicos. Al final, no pudo superar estos obstáculos y sucumbió a la estrategia superior y la perspicacia política de Octaviano.