1. Establecimiento del Partido Fascista: Mussolini transformó el Partido Nacional Fascista en la fuerza política dominante en Italia, convirtiendo efectivamente al país en un estado de partido único.
2. Propaganda: Mussolini utilizó los medios controlados por el estado para difundir la ideología fascista y promover sus políticas. Hizo hincapié en un liderazgo fuerte, el nacionalismo y la revitalización de la grandeza de Italia.
3. Eliminar la oposición: Mussolini reprimió cualquier oposición política, silenció a sus críticos y utilizó tácticas brutales para eliminar posibles amenazas a su poder.
Políticas económicas y sociales:
1. Reactivación económica: Mussolini se centró en reactivar la economía italiana a través de proyectos de obras públicas, modernización industrial y políticas que promovieran la autosuficiencia.
2. Estado corporativista: Implementó un modelo económico corporativista en el que los sindicatos y las organizaciones patronales se unieron bajo el control del gobierno para resolver conflictos y promover los intereses nacionales.
3. Programas Sociales: Mussolini introdujo varios programas sociales, incluidos derechos laborales, prestaciones de maternidad e iniciativas de bienestar social, para ganarse el apoyo popular.
Política exterior y expansión:
1. Nacionalismo agresivo: Mussolini siguió una política exterior agresiva para restaurar el estatus de Italia y expandir sus territorios. Se embarcó en conquistas militares en África, los Balcanes y el Mediterráneo.
2. Alianza con Alemania: Forjó una estrecha alianza con la Alemania nazi, que compartía ideologías fascistas y ambiciones expansionistas similares.
Culto a la personalidad:
Mussolini cultivó un culto a la personalidad, promocionándose a sí mismo como el "Duce" (líder) y presentándose como la encarnación del poder y la identidad italianos.
Supresión de la disidencia:
Estableció la OVRA (Organización para la Vigilancia y la Represión del Antifascismo), una fuerza policial secreta que reprimió la disidencia política y mantuvo el control de su régimen sobre la población.
Censura:
Mussolini instituyó una estricta censura de la prensa, la literatura y las artes, asegurando que sólo se difundieran mensajes alineados con la ideología fascista.
Educación:
El sistema educativo se reorganizó para adoctrinar a los estudiantes con valores fascistas, enfatizando la obediencia, la lealtad y la glorificación del estado.