¿No conoces el idioma del país que gobernarías? ¿Nunca has estado allí? Además, ¿provienes de una familia sencilla, clerical, y no tienes una sola gota de sangre azul en tus venas? No se pierde nada:de todos modos tienes la oportunidad de sentarte en el trono. Hay dos condiciones:debe ser Suecia y d