- Preservar la Unión: La Unión luchó para evitar que los estados confederados se separaran y para mantener la autoridad del gobierno federal en todo el país.
- Poner fin a la esclavitud: La Unión vio la abolición de la esclavitud como un imperativo moral y una forma de debilitar la economía confederada.
- Mantener el control de los estados fronterizos: Los estados fronterizos (como Maryland, Kentucky y Missouri) fueron cruciales para ambos lados porque brindaron acceso a recursos y rutas de transporte. La Unión buscó mantener a estos estados en la Unión e impedir que se unieran a la Confederación.
- Gana la guerra militarmente: La Unión tenía una clara ventaja en términos de población, recursos y capacidad industrial. Su objetivo era utilizar estas ventajas para derrotar a los ejércitos confederados y, en última instancia, ganar la guerra.
- Restaurar a los Estados Unidos como una nación única y unificada: La Unión quería reunir el país bajo el gobierno federal y establecer una paz duradera.
Estos objetivos evolucionaron a lo largo de la guerra a medida que la comprensión de la Unión sobre el conflicto y sus objetivos cambiaron. En las primeras etapas de la guerra, la atención se centró principalmente en preservar la Unión. Sin embargo, a medida que avanzaba la guerra y la cuestión de la esclavitud se hacía más central, la Unión veía cada vez más la abolición de la esclavitud como una condición necesaria para una paz duradera.