- Estados Unidos proporcionó un apoyo militar y económico muy necesario a las potencias aliadas. Estados Unidos envió más de 2 millones de tropas a Europa y sus fábricas produjeron grandes cantidades de municiones, alimentos y otros suministros para el esfuerzo bélico. Esto ayudó a cambiar el rumbo de la guerra a favor de los aliados, que habían estado luchando contra el Imperio alemán y sus aliados.
- Estados Unidos ayudó a desmoralizar a la población civil y militar alemana. La llegada de nuevas tropas estadounidenses al campo de batalla elevó la moral de las tropas aliadas y dejó claro a los alemanes que la guerra no iba a terminar a su favor. El pueblo alemán también estaba empezando a sufrir los efectos de la guerra, como la escasez de alimentos y la inflación, y la entrada de Estados Unidos en la guerra sólo empeoró las cosas.
- Estados Unidos jugó un papel clave en las negociaciones de paz que pusieron fin a la guerra. El Presidente Woodrow Wilson fue un destacado defensor de un acuerdo de paz basado en los principios de autodeterminación y seguridad colectiva. Estos principios quedaron consagrados en el Tratado de Versalles, que se firmó en 1919 y puso fin a la Primera Guerra Mundial.
En general, la entrada de Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial fue un importante punto de inflexión en la guerra y tuvo un impacto significativo en el resultado de la guerra. Estados Unidos brindó apoyo militar y económico vital a las potencias aliadas, ayudó a desmoralizar a la población militar y civil alemana y desempeñó un papel clave en las negociaciones de paz que pusieron fin a la guerra.