Hubo varias razones por las que los judíos fueron elegidos como chivos expiatorios. En primer lugar, eran una minoría visible y su apariencia distintiva los hacía fáciles de identificar. En segundo lugar, los judíos tenían una larga historia de persecución en Europa, lo que los convertía en un blanco fácil de culpar. En tercer lugar, los nazis pudieron explotar el antisemitismo que ya existía en Alemania.
Los nazis utilizaron la propaganda para difundir su mensaje antisemita y conseguir apoyo público para sus políticas. Los carteles de propaganda, las películas y los discursos retrataban a los judíos de forma negativa. Los nazis también alentaron la violencia contra los judíos, y esta violencia fue tolerada o incluso alentada por el gobierno.
Como resultado de la propaganda y la violencia de los nazis, se culpó a los judíos de una variedad de dificultades que los alemanes estaban experimentando durante el reinado de Hitler. Estas dificultades incluyeron:
* La crisis económica de los años 1930
* La derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial
* El ascenso del comunismo
* Los cambios sociales y culturales que se estaban produciendo en Alemania
Al culpar a los judíos de estos problemas, los nazis pudieron consolidar su poder y lograr su objetivo de crear una Alemania "racialmente pura".