Parece que la diosa Fortuna acompañó a Hitler en las diferentes ocasiones en las que se intentó eliminar, ya sea de forma individual como el estudiante suizo Maurice Bavaud o el carpintero Georg Elser, o en operaciones perfectamente orquestadas como Valquiria. Aún así, y como era lógico, se incrementaron las medidas de seguridad, como la utilización de catadores para degustar toda la comida del Führer. Esta es la historia de una de ellas… Margot Wölk , el único que sobrevivió a la guerra.
Margot
Cuando comenzó la guerra, Karl , el marido de Margot, fue reclutado para ir al frente y ella, una secretaria de 23 años, se quedó sola en Berlín. Hacía dos años que no sabía nada de su marido y su apartamento había quedado dañado por los bombardeos aliados, por lo que decidió abandonar Berlín y refugiarse en la casa que tenían sus suegros en Gross-Partsch. (hoy Parcz , Polonia), un pequeño pueblo en medio del bosque. Un lugar idílico con un pequeño inconveniente... la Guarida del Lobo (uno de los cuarteles generales de Hitler) estaba a unos tres kilómetros de distancia. Margot pudo disfrutar durante poco tiempo de aquel idílico lugar porque, apenas unos días después de su llegada, se presentaron varios miembros de las SS y se la llevaron a ella y a otros 14 jóvenes del pueblo para utilizarlos como catadores de la comida de Hitler. Estaban alojados en un edificio cercano al búnker y cada mañana debían probar la comida que salía de las cocinas.
Nunca hubo carne porque Hitler era vegetariano. La comida era muy buena, pero nunca pudimos disfrutarla pensando que podría estar envenenada.
Todo cambió el 20 de julio de 1944 cuando el maletín que llevaba el coronel Van Stauffenber se había ido a matar a Hitler:se reforzó la guardia y los catadores fueron sacados del complejo y encerrados en una vieja escuela abandonada de donde sólo salían a hacer su trabajo. Allí viviría uno de los peores momentos… una noche un oficial de las SS entró al colegio y la violó. Margot, tomó la decisión y trató de seguir con su vida escondiendo ese recuerdo suyo en lo más profundo de su alma. En 1945, ante el avance del Ejército Rojo, Hitler ordenó la demolición de la Guarida del Lobo con explosivos y abandonaron el lugar. Un oficial alemán se la quitó y le dijo que huyera de ella. Margot logró llegar a Berlín donde se refugió en casa de un médico amigo suyo... las SS la estaban buscando. En 1945 los soviéticos entraron en Berlín, la guerra había terminado... pero no para Margot:durante dos semanas en manos del Ejército Rojo, fue violada repetidamente provocándole heridas tan brutales que nunca pudo tener hijos.
En 1946 conoció al oficial que le había salvado la vida en Wolf's Lair y le dijo que el resto de las catadoras habían muerto allí. Estaba sola y desesperada, no tenía ganas de vivir hasta que... se reuniera con su marido. . Se apoyaron mutuamente y fueron felices durante 34 años. Karl falleció en 1980. En muchas ocasiones, los sueños de Margot la hicieron revivir esos momentos pero nunca dijo nada hasta que el invierno pasado, cuando recibió la visita de un periodista local con motivo de su 95 cumpleaños, decidió romper su silencio y cuenta su historia.
Fuentes:Spiegel, SDPnoticias