Para aprovechar esta oportunidad, sería esencial concentrar nuestros esfuerzos en esta zona donde el dispositivo alemán parece ceder y reforzar allí nuestra infantería para conquistar las crestas entre las que pasa la pequeña carretera de Bresse. Pero una verdadera fatalidad parece acechar nuestras empresas, porque lejos de poder concentrarse, el 2.º cuerpo debe, una vez más, dispersarse para responder a una nueva extensión de su frente hacia el norte.
Esta ampliación no tomó por sorpresa al general de Monsabert, que el día 9 creó un nuevo grupo destinado a cubrir su izquierda para afrontarla. Este grupo, comandado por el coronel Lecoq, está compuesto principalmente por F.F.I. apoyado por el 2º regimiento de spahis argelinos de reconocimiento.
Tendrá que aguantar los diez kilómetros adicionales de frente. Esto significa que, con poco apoyo y privado de refuerzos, ya no podré impulsar el ataque en dirección a Bresse. Por tanto, tendré que limitarme a las acciones imprescindibles para cubrir las posiciones conquistadas y proteger la preciosa carretera de Remiremont a Saulxures, mi único eje de abastecimiento. En otras palabras, lo único que puedo hacer es asegurar las crestas al norte del Moselotte.
Es un terreno que el heroísmo de las guerrillas de los Vosgos acaba de convertir en sagrado. Tres semanas antes, 83 de ellos cayeron en La Piquante-Pierre, en Noire-Goutte y en la cabecera de Rondfaing, después de una lucha desesperada sostenida durante cuatro días a uno contra diez.
Dónde cayeron , los hostigadores ahora luchan para vengarlos. Del 11 al 14 de octubre se suceden ataques y contraataques. El frío y la lluvia siguen sumando su suma de sufrimientos y dificultades a las impuestas por la feroz resistencia de la Wehrmacht. La mayor parte del 3er D.I.A. y los tabores acaban por apoderarse sólidamente de Piquante-Pierre, Rondfaing, Tête-des-Cerfs y Droit-de-Cornimont. Al mismo tiempo, el 3er ACR. del coronel Agostini pone su mano sobre la cabeza de Chapechatte, completa, de acuerdo con el 1.er C.P., la terrible conquista del bosque de Gehan y libera la localidad de Cornimont.
Estamos pues en el camino balcón que domina, hacia el oeste, el curso superior del Moselotte, pero el cansancio extremo del 3er D.I.A. prohibido pedirle que proporcione, nuevamente, el esfuerzo principal.
Para transmitirlo un poco, el 6º R.T.M. del Coronel Baillif, tomado del 4º D.M.M. de vuelta de los Alpes, está a mi disposición.
La comida es una de nuestras necesidades básicas, junto con el agua. No hace falta ser un genio para descubrir por qué. Nuestro cuerpo necesita nutrirse de todos estos diferentes alimentos. Su falta tiene consecuencias nefastas para todos, y mucho menos para las tropas que lucharon duro en el campo.