Historia antigua

Al-Andalus, ¿una época dorada?

Al-Andalus, ¿una época dorada?

La época de Al-Andalus, esa parte de España conquistada por árabes y bereberes a partir del 711 y convertida en musulmana, ¿fue una época dorada, un período de tolerancia donde judíos, cristianos y musulmanes han podido convivir armoniosamente? La realidad histórica contradice en parte esta visión idílica.

La igualdad entre religiones, en primer lugar, nunca ha existido en la península. Si podían practicar su religión, judíos y cristianos también estaban sujetos a discriminación fiscal, civil y legal. Posteriormente, bajo los almorávides y los almohades, se añadieron persecuciones que no dejaron más remedio que la conversión o la expulsión.

Esta oscura realidad no impidió que Al-Andalus viviera una civilización brillante. Todavía hoy podemos admirar estas joyas que son la Alhambra de Granada o la antigua Gran Mezquita de Córdoba. Al-Andalus fue también un centro de transferencia de conocimiento. En filosofía, Averroes busca redescubrir la pureza de los textos de Aristóteles, del mismo modo que, en medicina, Avenzoar concede un lugar crucial a la observación y la experiencia.

Muy pronto, en el mismo momento de su desaparición en 1492, Al-Andalus hechizó a artistas y escritores. Pero entre la literatura y la realidad hay un abismo. Después de la Reconquista, sólo se puede notar el contraste entre la generosidad caballeresca de una parte de la élite hacia los moriscos ficticios y la animosidad mostrada por la masa del pueblo hacia los descendientes de moros que permanecieron en la península, socialmente desfavorecidos, los moriscos. /P>