Alianzas políticas: Algunos cruzados estaban motivados por el deseo de ganar poder político o asegurar alianzas con otros gobernantes, con la esperanza de que la tercera cruzada les ayudara a lograr estos objetivos.
Fervor religioso: Muchos cruzados estaban motivados por la devoción religiosa y el deseo de cumplir lo que consideraban un deber sagrado:luchar por la liberación de Jerusalén.
Aventureros: Para algunas personas, las Cruzadas ofrecieron una oportunidad de aventura y emoción, así como la posibilidad de obtener ganancias financieras mediante el saqueo y el saqueo de los territorios conquistados.
Escapismo: Las cruzadas también ofrecieron una manera para que algunas personas dejaran atrás situaciones difíciles, problemas personales o deudas uniéndose a la Cruzada y buscando un nuevo comienzo en Tierra Santa.