
Los médicos de la corte visitan a Luis XIV en la película “Los últimos días de Luis XIV”
En los últimos años de su existencia Luis XIV padecía una forma grave de gangrena en la pierna izquierda, provocada a su vez por una gota preexistente, enfermedad frecuente entre personas de la época pertenecientes a un determinado rango, grandes consumidores de carnes rojas y caza.
La cura desarrollada para aliviar el dolor que el mencionado padecimiento le provocaba a la monarca es bastante cuestionable:sumergir la pierna enferma en una tina llena de vino aromatizado caliente , según un uso terapéutico del alcohol y hierbas ya experimentadas hace muchos siglos.
No sabemos si el tratamiento funcionó como analgésico, pero ciertamente no curó al ilustre paciente.
El Rey Sol murió el 1 de septiembre de 1715 , justo antes de cumplir 77 años, precisamente por las complicaciones por la gota y la consiguiente gangrena.