Historia antigua

La legitimación de la novela durante el siglo XIX

En sus inicios, el género novelístico era considerado sólo como un objeto de entretenimiento sin valor estético, que además estaba dirigido a un público femenino y, por tanto, por debajo del arte poético y dramático (género teatral). Muy poco apreciadas, sólo unas pocas novelas nacieron antes del siglo XIX, y sus autores afirman ferozmente que no fue su producción:escritores como el Abbé Prévost y Choderlos de Laclos aseguran en sus prefacios que no están en el origen de la novelas que publican en una época en la que la poesía domina la literatura.
Comienza así su búsqueda de legitimidad, para reivindicar un interés que nadie reconoce en ella, la novela se apropia de la Historia y trata sus acontecimientos de una manera más romántica. La novela viró rápidamente hacia la corriente realista (que nació cuando la novela se emancipó).
El objetivo del novelista era entonces hacer que la novela fuera seria y, en consecuencia, describir la realidad a la que está ligada:vestido, comida, enriquecimiento, parto, estas son las realidades que relaciona la novela y con las que desea tener una cierta legitimidad. Luego, los novelistas transformaron las costumbres populares en temas literarios:los personajes de Los Miserables pronto llegaron a ser tan dignos como la Princesa de Cleves. Además, los novelistas dan testimonio de la reversibilidad del estatus del Hombre, que ya no se dedica a su condición. Si alguna vez fue incapaz de ascender al rango de noble por ser del tercer estado, y viceversa, la Revolución Francesa permitió el paso potencial entre las nuevas clases sociales.
Fue, por tanto, su carácter contemporáneo y realista lo que llevó al predominio del género novelesco a finales del siglo XIX.


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