Lana: La lana era el material más utilizado para la confección de prendas de vestir en el siglo XVII. Era duradero, cálido y relativamente fácil de producir. Los soldados vestían abrigos, pantalones, medias y sombreros de lana.
Lino: El lino también era un material común utilizado para la ropa. Era más ligera y transpirable que la lana, lo que la hacía más cómoda de llevar en climas cálidos. Los soldados vestían camisas de lino, calzones y polainas (un tipo de cubierta para las piernas).
Cuero: El cuero se utilizaba para una variedad de artículos, como botas, zapatos, cinturones y bolsos. Era un material fuerte y duradero que podía soportar los rigores de la batalla.
Metal: El metal se utilizaba para armaduras, cascos y armas. La armadura estaba hecha de acero o hierro y se usaba para proteger a los soldados de los ataques enemigos. Los cascos también estaban hechos de metal y protegían la cabeza de lesiones.
Otros materiales: Otros materiales utilizados para la ropa y el equipo incluyeron seda, terciopelo y pieles. Estos materiales eran utilizados a menudo por oficiales y otros soldados de alto rango.