Historia antigua

¿Cómo eran las sillas de montar en las justas medievales?

Las sillas de montar de justa medievales, conocidas como "sillas de montar de justa" o "sillas de montar con armadura", eran sillas de montar especializadas diseñadas para proporcionar estabilidad, comodidad y protección tanto al jinete como al caballo durante los torneos y combates de justa. Estas son las principales características de las sillas de justa medievales:

1. Espalda y frente altos: Las sillas de justa tenían pomos altos en la parte delantera y mechones elevados en la parte trasera. Estos proporcionaban apoyo adicional y evitaban que el jinete cayera de la silla en caso de una fuerte colisión con otro justista.

2. Asiento ancho :Los asientos de las sillas de justa eran más anchos en comparación con las sillas de montar normales. Esto aumentó la estabilidad al distribuir el peso del ciclista de manera más uniforme y reducir la probabilidad de deslizarse hacia un lado.

3. Refuerzo :Las sillas de justa se reforzaron con acolchado adicional, placas de metal y cuero grueso para absorber los golpes y el impacto de las colisiones con lanzas.

4. Coraza :Se adjuntó a la silla una coraza que protegía el pecho del caballo y los muslos del jinete durante las justas.

5. Crupera :Una correa ancha conocida como grupera se sujetaba desde la silla a la cola del caballo para evitar que la silla se deslizara hacia adelante durante las intensas fuerzas de las justas.

6. Rodillos para muslos: Algunas sillas de montar tenían refuerzos para los muslos o refuerzos a los lados para brindar soporte adicional y evitar que el ciclista se resbalara.

7. Mesa de acero :El cuerpo de la silla a menudo se reforzaba con placas de acero para proteger la espalda y la columna del jinete del impacto de las lanzas.

8. Funda para silla de montar :Las sillas de montar de justa a menudo estaban cubiertas con ricas telas, cuero o terciopelo y decoradas con el escudo de armas del jinete o símbolos heráldicos.

Estas características garantizaban la seguridad, estabilidad y comodidad del jinete durante las competiciones de justas. Las sillas de montar eran un equipo esencial en los torneos medievales, donde tanto la habilidad como el equipo de protección eran cruciales para evitar lesiones graves o la muerte.