Conquistas militares:
1. Batalla de Manzikert (1071): La victoria selyúcida en Manzikert contra el Imperio bizantino les dio el control de gran parte de Anatolia y allanó el camino para su expansión hacia los territorios abasíes.
2. Conquista de Bagdad (1055): El líder selyúcida, Tughril Beg, entró en Bagdad y asumió el título de sultán. Aunque el califa abasí conservó su autoridad religiosa, se convirtió en una figura decorativa y el poder político se transfirió a los gobernantes selyúcidas.
Influencia política:
1. Superioridad militar: Los turcos selyúcidas se establecieron como comandantes militares formidables. Su control sobre las fuerzas militares dentro del dominio abasí les dio una influencia considerable sobre las decisiones políticas.
2. Puestos Administrativos: Los turcos selyúcidas fueron designados para puestos administrativos influyentes dentro del gobierno abasí. Con el tiempo, estos roles les permitieron consolidar su control sobre diversos aspectos de los asuntos del Estado.
3. Matrimonios y Alianzas: Los gobernantes selyúcidas formaron alianzas estratégicas con princesas abasíes y otras familias influyentes. Estas alianzas matrimoniales solidificaron aún más su posición y legitimidad dentro del panorama político.
4. Integración Cultural: Los turcos selyúcidas adoptaron gradualmente aspectos de la cultura y la civilización islámicas, promoviendo una combinación de sus tradiciones nómadas con el patrimonio cultural existente en la región.
Como resultado de estos factores, los abasíes se convirtieron en los jefes nominales del mundo islámico, mientras que el poder real residía en los sultanes selyúcidas. Este cambio tuvo implicaciones significativas para la dinámica política, militar y cultural de Medio Oriente.