Historia antigua

Abū ʻUbayd al-Bakrī y los reinos taifas

Abū ʻUbayd al-Bakrī y los reinos taifas

Tanto los bereberes como los eslavos buscaron tierra y poder para mejorar su situación anterior en el Magreb. Todos intentaron reproducirse en los pequeños estados que formaban el esquema despótico omeya, lo que hizo que algunos de los territorios adquirieran cierta preeminencia sobre sus vecinos. Por ello, muchas veces tuvieron que pedir ayuda a los reinos cristianos, los cuales recibieron su apoyo militar en abundancia, provocando que se rompiera el equilibrio preexistente entre los andaluces y estos. El proceso de segregación y organización de las primeras taifas(2) fue bastante rápido. Durante cincuenta años el pago de los parias(3) por protección a los cristianos del norte impulsó su riqueza y hundió al sur en una profunda crisis(4).

La época de las primeras taifas Terminaría con el asalto de Alfonso VI a Toledo, que provocó la ruptura de la frontera del Tajo y la huida hacia el sur de miles de familias. Esto significó la peor ruptura social en al-Andalus, donde una base humana estable y diversa había encontrado su equilibrio bajo el poder de emires y califas. Una migración masiva de bereberes y esclavos agrupados bajo el liderazgo de diferentes generales fue la causa del desequilibrio(5). Además, la mala gestión de estos grupos, que deberían haberse asentado en las fronteras donde su belicosidad hubiera sido beneficiosa, alimentó las disputas entre quienes estaban cerca del poder porque se les permitía participar en la política cordobesa. Entonces se produce la degradación de la dinastía omeya, la pérdida de su apoyo ideológico, el tejido estructural del Islam.

La gran mayoría de la población eran hispanos-godos , que se convirtió para prosperar en la sociedad islámica. Los judíos permanecieron culturalmente segregados, sin embargo, se habían asimilado más intensamente. Los esclavos, que no sabían árabe, permanecieron en grupos no integrados, mercenarios, sin idiosincrasia ni tierra hasta que crearon su propia taifa.

Los árabes formaron el grupo más homogéneo y el que pasó a formar la élite política, social, religiosa y económica. Su actitud fue segregadora hacia otras minorías(6), lo que provocó conflictos interraciales, especialmente con los bereberes. Representan el segundo grupo humano más extendido, que llegó a la Península en sucesivas oleadas y atravesó distintas etapas de integración y predominio social. Tuvieron que ser islamizados muy rápidamente y fueron organizados en escuadrones de caballería con una fuerte cohesión interna. Apenas se integraron en la sociedad andaluza y se dedicaron principalmente a la conquista y el saqueo(7).

La familia de Abū Zayd o Abū Muṣʻab ʻAbd al-ʻAziz al-Bakrī , padre de nuestro personaje, pertenecía a los más destacados de la región de Huelva. Desde el inicio de las guerras civiles (fitna) del siglo XI, ʻAbd al-ʻAziz es reconocido como soberano de Huelva y Saltés en 403 H/1012-1013. Las fuentes mencionan la importancia económica y marítima de Saltés y la arqueología ha revelado su importancia minera.

Las referencias a la prosperidad de esta taifa se repiten en las fuentes hasta la llegada de al-Muʻtaḍid de Sevilla. Nada más conquistar la vecina Niebla se dirigió hacia Huelva en 1051. ʻAbd al-ʻAziz intentó detenerle mediante pactos y le entregó Huelva para retirarse a Saltés, pero al-Muʻtaḍid no respetó el pacto y la familia de al-Bakrī (8) tuvo destierro en Córdoba, ʻAbd al-ʻAziz muriendo en el año 1058(9). Además de autor, al-Bakrī fue un intelectual cortesano vinculado a la actividad política.

al-Bakrī. Formación, actividad y legado

Según Ibn Baškuwāl , desarrolló su actividad en diferentes ciudades, como Almería, donde aprendió sus conocimientos geográficos de al-ʻUḏrī. Sin embargo, destaca su actividad cortesana en la corte de la taifa sevillana en la época (10) de al-Muʻtamid , sucesor de al-Muʻtaḍid. Su poesía manifiesta su cercanía a los círculos de poder. Este fue un momento propicio para el cultivo de las letras en los distintos tribunales.

Su formación (11) comienza con su traslado a Córdoba. Ibn Baškuwāl menciona a cuatro de sus maestros:el cronista cordobés Ibn Ḥayyān , el geógrafo al-ʻUḏrī ya mencionado, al-Muṣḥafi , alfaquí, letrado y lingüista, y al-Barr , especialista en fiqh o derecho islámico(12). De su producción geográfica destacan dos obras (13):el Muʻjam mā istaʻcham , diccionario geográfico que aún se conserva y trata de toponímicos de la Península Arábiga; y elKitāb al-masālik wa-l-mamālik :

Chejne insiste en que al-Bakrī nunca se fue de al-Andalus y que basó su trabajo en información recopilada de otros autores, tanto occidentales como orientales. Algunos de ellos fueron Ibn Rustah, al-Masʻūdī, Muḥammad Ibn Yūsuf al-Warrāq, al-Rāzī, Ibrāhīm Ibn Yaʻqūb al-Isrāʼ ilī, al-ʻUḏrī, etc.

Existen varios estudios publicados sobre la figura de Abū ʻUbayd al-Bakrī y entre las fuentes que nos informan sobre su vida contamos con diccionarios biobibliográficos y crónicas. Las primeras son biografías del personaje contenidas en repertorios de ulemas y alfaquíes, un género de la literatura árabe medieval del que sólo aportan algunos datos. Su producción se caracteriza por su amplitud temática y su variedad, un total de doce obras. Destaca su producción lingüística, aunque hoy en día se le conoce como el principal geógrafo de al-Andalus. Se atribuyen suplementos. En los repertorios andaluces, el diccionario de los sabios cordobeses Ibn Baškuwāl destaca. (14) (1139).

Del resto de repertorios biográficos, sólo el de al-Dabbī (1202/1203), menciona a nuestro personaje, aportando una fecha de su muerte nueve años posterior a la presentada en la citada obra. Ibn al-Abbār reproduce prácticamente la obra de Ibn Baškuwāl en su totalidad y añade fragmentos de textos de la obra de al-Bakrī, así como un párrafo del antólogo Ibn Jāqān(15).

En cuanto a los repertorios orientales(16), nuestro personaje es mencionado en las obras de Yāqūt al-Hamawī (1229); el de al-Safadi (1297-1363); y el de al-Suyūtī , que indica una fecha de muerte cercana a la de al-Dabbī.

También contamos con la crónica del cordobés Ibn Ḥayyān (1076) y un fragmento de una crónica anónima de la obra del norteafricano Ibn ʻIḏārī (siglo XIV). Ambos mencionan la pertenencia de nuestro autor a la rama onubense de la familia Bakrí.

Otra fuente importante es la antología literaria de Ibn Bassām. , con un capítulo en el que aporta diversos textos del autor y algunos de sus poemas.

A partir de todas ellas, sólo hemos podido obtener tres fechas determinadas(17) en referencia a la vida de al-Bakrī:la fecha de su muerte en 1094, cuando salió de Saltés para ir a Córdoba en 1051, y la fecha de composición de su descripción geográfica en 1067/1068. Su fecha de nacimiento sigue siendo desconocida.

A modo de conclusión, podemos decir que la obra de al-Bakrī tiene un valor fundamental como fuente de conocimiento geográfico e histórico. personaje. para el conocimiento de la España musulmana durante la Edad Media. El Kitāb al-masālik wa-l-mamālik , a pesar de haberse conservado de forma fragmentaria, nos proporciona una serie de datos que nos permiten hacernos una idea de cómo veían los propios andaluces su entorno y su pasado, además de ser una muestra importante de hasta qué punto su influencia cultural y científicos.

Sin embargo, a la hora de afrontar el análisis de este tipo de fuentes, nunca debemos olvidar que sus autores pertenecían a un contexto social concreto y que el resultado de su trabajo tenía una finalidad concreta, que muchas veces estaba al servicio de quienes detentaban el poder.

Teniendo todo esto en cuenta, podemos acercarnos al autor y sus textos y realizar un análisis exhaustivo que nos permitirá comprender mejor nuestro pasado y valorar el legado andalusí que tiene. tenía en su justa medida. una gran importancia en la construcción de nuestro presente.

Bibliografía

  • Álvarez Palenzuela, V. A. (2011):Historia de España en la Edad Media , Editorial Planeta S.A., Barcelona, ​​915 págs.
  • Bonnassie, P., Guichard, P. y Gerbet, M. C. (2001):Las Españas medievales , Editorial Crítica S. L., Barcelona, ​​368 págs.
  • Carrasco, J, Salrach, J. M., Valdeón, J. y Viguera, M. J. (2002):Historia de las Españas medievales , Editorial Crítica S. L., Barcelona, ​​380 págs.
  • Chejne, A. G. (1974):Historia de la España musulmana , Ediciones Cátedra S. A., Madrid, 432 págs.
  • García Sanjuan, A. (2002):«El polígrafo onubense Abú ʻUbayd al-Bakri», en Revista de Investigación Aestuarja , Diputación de Huelva, año 9, núm. 8, págs. 13-34.
  • Monsalvo Antón, J. M. (2014):Historia de la España medieval , Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca, 434 págs.
  • Viguera Molíns, M. J. (1992):Los reinos de taifas y las invasiones del Magreb (Al-Andalus del XI al XIII) , Editorial MAPFRE S.A., Madrid, 377 págs.

Notas

(1). Monsalvo Antón, J. M. (2014):Historia de la España Medieval, Ediciones Universidad de Salamanca,
Salamanca, 434 pp.

(dos). Monsalvo Antón, J. M. (2014)…

(3). Ibídem.

(4). Ibídem.

(5). Ibídem.

(6). Ibídem.

(7). Viguera Molíns, M. J. (1992):Los reinos de taifas y las invasiones del Magreb (Al-Andalus del XI al XIII), Editorial MAPFRE S. A., Madrid, 377 pp.

(8). Viguera Molins, M. J. (1992) …

(9). Ibídem.

(10). Ibídem.

(once). Ibídem.

(12). García Sanjuan, A. (2002):El polígrafo onubense, Abú ʻUbayd al-Bakri, en Revista de Investigación Aestuarja, Diputación de Huelva, año 9, nº 8, pp. 13-34.

(13). Chejne, A. G. (1974):Historia de la España musulmana, Ediciones Cátedra S. A., Madrid, 432 pp.

(14). García Sanjuán, A. (2002) …

(quince). Ibídem.

(16). Ibídem.

(17). Ibídem.

Este artículo forma parte del II Concurso de Microensayo y Microrrelato Histórico Deserta Ferro en la categoría microensayo. La documentación, veracidad y originalidad del artículo son responsabilidad exclusiva de su autor.