Si el derecho a la ciudadanía romana estaba muy restringido, además de la transmisión por herencia, con el tiempo y la expansión del Imperio otros pueblos colonizados pudieron acceder a él. Así, en el año 48, el emperador Claudio, nacido él mismo fuera de Roma, concedió la ciudadanía a la llamada Galia peluda y les ofreció acceso a la magistratura. Esta política de apertura será continuada por Vespasiano y luego por Marc Aurèle (Tabla de Banasa, 169-177).
212
Personajes
Caracalla
Procedimiento
Si la ciudadanía es hereditaria, a veces también se puede comprar (con transmisión incluida) u obtenerse después de veinticinco años de buen y leal servicio en las tropas auxiliares del ejército imperial.
El emperador Caracalla (188-217), hijo de Septimio Severo, nació en Lyon y no en Roma; tuvo, por tanto, otra visión del Imperio Romano que reinó entre 211 y 217. Así, al año siguiente de su llegada al poder, promulgó un edicto que ofrecía la ciudadanía a todos los habitantes libres del Imperio. Sólo no se incluyen los “dedices” (es decir, bárbaros subyugados por la fuerza) y los esclavos.
Los motivos de Caracalla son poco conocidos porque no existe ningún texto relativo al edicto con precisión. Se sospecha que el emperador tenía un motivo fiscal para aumentar los ingresos imperiales. De hecho, el impuesto de los ciudadanos va a la ciudad en la que viven y no al tesoro imperial si no tienen la nacionalidad romana.
También puede haber habido motivaciones administrativas. De hecho, al ser los estatutos tan diversos y variados dentro del Imperio, una simplificación debe haber sido beneficiosa para gestionar el Imperio.
Además, el emperador, que desea federar a su pueblo, aumenta su número para aumentar su poder. Finalmente, ser ciudadano romano es un honor; por lo tanto, otorgar esta ciudadanía a otros pueblos es ofrecerles esta dignidad así como las ventajas que la acompañan.
Consecuencias
- Uno de los atractivos de servir en las tropas del ejército era el acceso a la ciudadanía romana. La promulgación de este edicto provocó verdaderas dificultades en el reclutamiento en el ejército que, en aquel momento, ya no era un ejército de conquista sino de defensa, y mucho menos apasionante.
- Los cristianos errantes se convierten en ciudadanos romanos, pero debido a que se niegan a servir a los dioses del Imperio, serán perseguidos.
- Este edicto es un factor de división ya que divide al pueblo en dos clases distintas:los honestiores , la clase dirigente que tiene ciudadanía desde la República, y los humiliores , los humildes.
- Si los pueblos anexados acogieron con alegría este edicto, lo cierto es que el objetivo del emperador sigue siendo una motivación fiscal. Sin embargo, este texto permitió unificar el Imperio y aumentar su poder.