Dmitry Ofharenko nació en el este de Ucrania, cerca de Kharkiv. Su padre era carpintero y él mismo no tuvo ningún atractivo para aprender hasta llegar al quinto grado. Sin embargo, lo que aprendió bien de su padre fue cómo manejar el hacha...
En julio de 1941, la Unión Soviética atravesaba tiempos dramáticos. Las falanges alemanas arrasaron con todo lo que encontraron a su paso sin poder interceptarlos.
Ofharenko estaba entonces sirviendo en el 389.º Regimiento de Fusileros (F) de la 176.ª División de Fusileros (MT). Se le asignó la misión de transportar municiones con un carro. El 13 de julio, Ofharenko, mientras conducía el carro de municiones, se encontró de repente delante de 50 alemanes. El soldado soviético se sorprendió y un oficial alemán tomó su rifle. Sin embargo, el alemán no vio que Ofharenko también llevaba un hacha escondida.
Okharenko, sin pensarlo mucho, agarró su hacha y de un solo golpe decapitó al oficial alemán.
Inmediatamente agarró tres granadas y las lanzó contra los alemanes reunidos, matando a entre 20 y 21 personas. Los alemanes restantes huyeron presas del pánico. Okharenko alcanzó a otro oficial alemán y lo decapitó con su hacha.
Luego tomó las armas, mapas y documentos personales de todos los alemanes muertos y regresó al cuartel general de su regimiento. Al principio nadie le creyó cuando contó su historia. Pero cuando acudieron al lugar de la masacre, vieron con sus propios ojos que decía la verdad.
Por este logro se le concedió el título de Héroe de la Unión Soviética. Algunas fuentes afirman que los alemanes eran 30, no 50. Esto, en cualquier caso, no resta valor a su logro en absoluto.
En la continuación de la guerra, Ofharenko luchó como ametrallador. Desafortunadamente para él, no pudo ver el día de la victoria. Murió el 28 de enero de 1945 luchando en Hungría. Pero siempre fue conocido como "el soldado del hacha".