El Imperio Mongol, fundado por Genghis Khan en el siglo XIII, fue el imperio terrestre contiguo más grande de la historia. Los mongoles tenían reputación de guerreros feroces y hábiles, y su imperio se construyó sobre la base de la conquista y el poder militar.
El ejército mongol estaba muy organizado y disciplinado. Estaba dividido en unidades de 100, 1.000 y 10.000 hombres. Cada unidad estaba comandada por un general que se encargaba de entrenar y dirigir a sus hombres.
Los mongoles eran expertos en una variedad de tácticas militares, incluido el tiro con arco, las cargas de caballería y la guerra de asedio. También eran expertos en utilizar la guerra psicológica para desmoralizar a sus oponentes.
El Imperio Mongol se extendía desde el Océano Pacífico hasta Europa del Este. Incluía partes de la actual Mongolia, China, Rusia, Irán, Irak, Turquía y Europa del Este.
Los mongoles finalmente fueron derrotados, pero su imperio tuvo un impacto duradero en el mundo. Introdujeron nuevas tecnologías e ideas en muchas partes diferentes del mundo. También ayudaron a establecer rutas comerciales entre Europa y Asia.