Cloto (Κλωθώ):Su nombre deriva del verbo "klotho" (κλώθω), que significa "hilar". Cloto era el encargado de hilar el hilo de la vida de cada individuo. Ella representó el comienzo de la vida y la creación.
Lachesis (Λάχεσις):Su nombre proviene del verbo "lagchano" (λαγχάνω), que significa "echar suertes". Lachesis determinó la duración de la vida y la porción de vida de cada persona midiendo el hilo hilado por Cloto. Ella simbolizaba las oportunidades y elecciones de la vida.
Atropos (Ἄτροπος):Su nombre proviene de la palabra "a-trepo" (ἀ-τρέπω), que significa "inquebrantable" o "inevitable". Átropos ejercía el poder de cortar el hilo de la vida, representando la muerte y la finalidad del destino.
Juntas, las Tres Parcas dieron forma al destino de dioses y mortales por igual. Sus decretos eran inalterables, incluso para los seres divinos más poderosos. A veces se las representaba como mujeres mayores adornadas con símbolos relacionados con el hilado y la medición, enfatizando su papel en el tejido del destino.
El concepto de destino jugó un papel importante en las tragedias, la filosofía y la literatura griegas. La creencia en un destino predeterminado influyó en la forma en que los antiguos griegos percibían su lugar en el mundo y llevó a la contemplación de temas de elección, libre albedrío y la interacción entre la voluntad divina y las acciones humanas.