La batalla de Salamina está considerada una de las más importantes de la historia de la cultura occidental.
De hecho, tanto la batalla de Salamina como la posterior en Platea marcaron un punto de inflexión en las guerras persas. Después de ellos, el imperio persa nunca más intentó conquistar Hellas. Una victoria persa en Salamina habría alterado no sólo la historia de la antigua Grecia sino la de toda Europa occidental.
En 2016, un equipo de arqueólogos griegos y daneses encontró los restos de la antigua base naval ateniense construida en el 493 a.C. en El Pireo. Los barcos de la flota griega conjunta se refugiaron allí durante las semanas y días previos a la batalla contra los persas.
Nueve meses después, el Ministerio de Cultura griego anunció otro descubrimiento, el del lugar de la primera posición de los barcos helenos el día de la batalla. Las fuentes históricas (principalmente Heródoto, Tucídides y Plutarco) que hablan de lo ocurrido en Salamina hacen muy difícil determinar tanto el momento exacto de la batalla como las posiciones y movimientos de los contendientes.
El curso de la pelea tampoco se ha descrito con precisión y, aparte del rey persa Jerjes, que la observaba desde la cima del monte Aigaleo, es poco probable que quienes participaron en la pelea tuvieran demasiado claro lo que estaba sucediendo. /P>
La mayor parte de lo que sabemos se basa en suposiciones y deducciones lógicas teniendo en cuenta la situación, el terreno y la información de las fuentes.
Por eso el descubrimiento, realizado por un equipo científico de 20 arqueólogos bajo las aguas de la bahía de Ambelakia, en la costa este de Salamina, es sin duda apasionante e importante.
Los trabajos comenzaron en noviembre de 2016 en la parte occidental de la bahía de Ambelakia, donde aparecieron estructuras sumergidas que, según los arqueólogos, corresponden al antiguo puerto militar y comercial de la antigua ciudad-estado de Salamina. Aquí se habría concentrado al menos una parte de la flota griega el día antes de la batalla del 480 a.C. Muy cerca del lugar se encuentran los monumentos del Polyandreion (la tumba de los soldados) y el moderno de Kynosoura.
Pero también en tres lados de la bahía, al norte, al oeste y al sur, se han encontrado restos de estructuras portuarias, fortificaciones y diversos edificios. En la parte sur hay un largo muelle de 160 metros de largo, en cuyo extremo se encuentra una torre defensiva circular de 7 metros de diámetro. También aparecieron fragmentos de ánforas y otros tipos de cerámica, monedas corintias y otros objetos pequeños.